jueves, 31 de diciembre de 2009

Orden y concierto


Mi madre tiene una curiosa teoría. Dice que el año que empieza, comienza como el año que acaba.
Por eso, nos recomienda que paguemos deudas, aclaremos cuentas y asuntos, terminemos cosas a medias, porque si no empezaremos de igual manera: un poco manga por hombro. Como buen hijo, hago caso a mi madre e intento atar todos los cabos sueltos que puedo.
Miro atrás y veo un 2009 en el que cumplí muchos sueños (trabajé duro para ello) y miro adelante y veo otros que me esperan.
Creo que 2010 será aún mejor: no por nada es un año 10.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Háblate con tu médico de cabecera.